En cada corazón...
En cada corazón de madre, renace la esperanza con el nacimiento del Niño Jesús. Este acontecimiento que cada año maravilla al mundo y nos trae consigo la esperanza de renovar nuestra fe, de desear con mucho amor, un mundo mejor; adonde nuestros niños y jóvenes puedan ver cumplidos sus sueños e ilusiones.
Este acontecimiento, que ya compartimos en familia, también puede comprometernos a los adultos todos, padres, familias, asociaciones, autoridades, a hacer realidad una sociedad más justa.
Muchos vivimos situaciones difíciles, de tristeza, de dolor, de pérdidas irreparables.
Pero con su nacimiento, Jesús, hecho Niño, nos invitó a cambiar nuestro dolor por la alegría de un niño, por la esperanza de los jóvenes. Ellos esperan de nosotros, como la noche del amanecer, como la oscuridad de la luz, pintada de mil colores.
Es por ésto que debemos darles a nuestros hijos, el ejemplo de la vida y la palabra.
Y hacerlo con una frase que sintetiza todo el amor: "Te amo hijo". "Te amo hija"...
Hagamos un lugar en nuestro corazón para acoger a este pequeño gran niño, que nació allá, en Belén, en un pesebre, del amor de María, su santísima madre... porque no había lugar para ellos. ¡Se imaginan ustedes...! " no había lugar para el Salvador del mundo"...
Que Él haya encontrado un lugar en cada corazón, en la noche de Navidad.
Blanca Lidia Adamo (Escritora argentina) Santiago del Estero. Diciembre de 2009
Este acontecimiento, que ya compartimos en familia, también puede comprometernos a los adultos todos, padres, familias, asociaciones, autoridades, a hacer realidad una sociedad más justa.
Muchos vivimos situaciones difíciles, de tristeza, de dolor, de pérdidas irreparables.
Pero con su nacimiento, Jesús, hecho Niño, nos invitó a cambiar nuestro dolor por la alegría de un niño, por la esperanza de los jóvenes. Ellos esperan de nosotros, como la noche del amanecer, como la oscuridad de la luz, pintada de mil colores.
Es por ésto que debemos darles a nuestros hijos, el ejemplo de la vida y la palabra.
Y hacerlo con una frase que sintetiza todo el amor: "Te amo hijo". "Te amo hija"...
Hagamos un lugar en nuestro corazón para acoger a este pequeño gran niño, que nació allá, en Belén, en un pesebre, del amor de María, su santísima madre... porque no había lugar para ellos. ¡Se imaginan ustedes...! " no había lugar para el Salvador del mundo"...
Que Él haya encontrado un lugar en cada corazón, en la noche de Navidad.
Blanca Lidia Adamo (Escritora argentina) Santiago del Estero. Diciembre de 2009
Muchas Gracias, amiga Blanca.
ResponderEliminarDesde esta inmensa y silenciosa región pampeana, a tu tierra de soles y alegrías, te mando música para leer tus obras. Un millón de besos
Amalia